La sífilis es una enfermedad de transmisión sexual (ETS) causada por la bacteria Treponema pallidum. Se transmite por contacto vaginal, anal u oral. También puede ser congénita, transmitida de madre a hijo durante el embarazo o el parto.
Los síntomas de las sífilis son comunes en hombre y mujeres y dependen de la etapa de la infección. Estas son las etapas de la sífilis y los síntomas asociados a cada una:
- Sífilis primaria: aparece de 2 a 3 semanas después del contacto sexual con una persona infectada. El síntoma principal de esta etapa es la aparición de una úlcera o chancro no dolorosa en la parte del cuerpo que ha estado en contacto con la bacteria. Esta lesión aparece con más frecuencia en pene, vulva, vagina o ano. Aunque también puede presentarse en la boca o los labios. Esta úlcera puede pasar desapercibida y ser una importante vía de contagio a las parejas sexuales de la persona infectada.
- Sífilis secundaria: aparece si no se ha tratado la infección en la etapa primaria por proliferación de las bacterias en la sangre, de 6 a 6 semanas desde la aparición de la úlcera de la fase primaria. Los síntomas son: erupción cutánea, que se presenta en palmas de las manos y plantas de los pies, inflamación en la zona genital manchas blancas en la boca e inflamación de glándulas.
La sífilis secundaria es altamente transmisible para las parejas sexuales. Sin tratamiento, estos síntomas suelen desaparecer al cabo de varias semanas, pero la enfermedad no habrá desaparecido, habrá progresado a la fase siguiente.
- Sífilis latente: una vez que han desaparecido los síntomas de la sífilis secundaria, aparece esta fase, en la que la enfermedad está presente en sangre. Esta etapa en la que no se presentan síntomas puede durar años.
- Sífilis terciaria: se calcula que en aproximadamente 1 de cada 10 personas sin tratamiento se desarrollen problemas neurológicos, óseos, articulares o cardiacos graves. Se da años después de la infección.
La úlcera de la sífilis primaria y los síntomas de la fase secundaria pueden pasar desapercibidos. Se recomienda llevar a cabo pruebas periódicas para la detección de sífilis. Los análisis de anticuerpos en sangre son útiles, así como la detección de ADN de T. pallidum (bacteria causante de la enfermedad) mediante PCR, siendo esta vía más sensible y específica.
El tratamiento de la sífilis depende de la fase en la que se encuentre la enfermedad. Para la sífilis primaria, secundaria y latente inicial se utilizan antibióticos. Para la sífilis latente tardía, terciaria y congénita, se utiliza también antibióticos pero con diferentes pautas/dosis. Es importante hacer seguimiento después del tratamiento.
Para prevenir la sífilis, es importante practicar sexo seguro y usar preservativos en cada acto sexual. También es importante hacerse la prueba regularmente si se practica sexo no seguro y/o con diferentes parejas sexuales, es importante tratar cualquier infección de inmediato. Si estás embarazada, es esencial hacerte la prueba para detectar cualquier infección y tratarla antes del parto, ya que la sífilis puede ser peligrosa y causar complicaciones graves.